Los desafíos de enfrentar una estructura de costos crecientes en la salud privada

En Argentina se ha observado un rápido crecimiento del sector privado en el área de la salud en los últimos años, no obstante si se examinan los costos que éstas instituciones han venido enfrentando, se aprecia un crecimiento de los mismos por encima de la evolución general de los precios en la economía. En este sentido la supervivencia y crecimiento del sector se ha logrado gracias al crecimiento en volumen de las prestaciones que dichas instituciones brindan, aunque el crecimiento en sus costos amenaza con poner límites a esta dinámica.

 

Aún con el esfuerzo que ello significa, de los principales insumos involucrados en la producción de atención médica, los costos laborales representan tres cuartas partes (74%) de los costos totales de las clínicas y sanatorios. En orden de importancia, le siguen los insumos médicos y no médicos que representan entre ambos aproximadamente el 20% del costo total y un 4% resulta la estimación de las necesidades de inversiones. Dichas proporciones surgen a partir del Índice de Precios de Insumos de la Atención Médica elaborado por ADECRA, el cual mide la evolución de los precios de los principales insumos que se utilizan en las instituciones privadas con internación para producir servicios de atención médica.

 

Así, se puede observar que a lo largo de los últimos doce años de información disponible (2006-2017), los precios de los insumos para la atención médica crecieron en más de quince veces, donde lo que tuvo mayor expansión fueron los costos laborales, que lo hicieron en casi dieciocho veces, seguido por los insumos no médicos (más de diecisiete veces). Al mismo tiempo que el nivel general de precios de la economía se incrementó doce veces en el periodo considerado.

En igual sentido, y principalmente entre los insumos médicos (con importante participación de componentes importados) la dinámica de costos habría tenido un fuerte impacto durante el primer semestre de 2018, producto de la depreciación de la moneda doméstica respecto al dólar.

 

Esos aspectos, sumados a otras restricciones que afectan al sector, tales como una dinámica tributaria regresiva, impone desafíos que requieren la necesidad de pensar nuevas políticas públicas enfocadas en el sector sanitario, en pos de la sostenibilidad de una buena y extendida calidad en las prestaciones médicas, posibilitando una mayor participación de inversiones tendientes a la incorporación de los últimos avances tecnológicos para el cuidado de la salud.

 

En este sentido, las estrategias necesarias podrían encontrarse en áreas impositivas y regulatorias. Como ser, la devolución de los créditos fiscales de IVA que se generan por la exención que se otorga a las obras sociales y empresas de medicina prepaga; la modernización del convenio colectivo de trabajo de la actividad y el ordenamiento en cuanto a la actual superposición de regulaciones entre distintos niveles de gobierno.

 

María Laura Caullo - Lic. en Economía